Tall Fusta, socio de Club Madera, está llevando a cabo la rehabilitación energética de la fachada de un edificio corporativo de 7 plantas en Andorra con certificado Passivhaus.
Este proceso consiste en modificar la piel exterior del edificio, sustituyendo la fachada actual por una nueva de paneles prefabricados con estructura interior con microlaminado LVL, con revestimiento de paneles trespa HPL.
El uso de este tipo de material permite realizar secciones de gran dimensión, pero con poco espesor, consiguiendo que el puente térmico sea mínimo. Además, tiene mucha estabilidad dimensional y no se deforma aunque sea esbelta.